Récord 2017: 13 – 3
Draft (por orden de selección): T Isaiah Wynn (pick 23), RB Sony Michel (pick 31), CB Duke Dawson (pick 56), ILB Ja’whaun Bentley (pick 143), ILB Christian Sam (pick 178), WR Braxton Berrios (pick 210), QB Danny Etlin (pick 219), DB Keion Crossen (pick 243), TE Ryan Izzo (pick 250)
Agencia libre
Jugadores adquiridos: DE Adrian Clayborn, RB Jeremy Hill, CB Jason McCourty, WR Jordan Matthews, DT Danny Shelton, WR / KR Cordarrelle Patterson
Jugadores perdidos: RB Dion Lewis (Tennessee), CB Malcolm Butler (Tennessee), T Cameron Fleming (Dallas), Nate Solder (NY Giants), TE Martellus Bennett (retiro), WR Danny Amendola (Miami)
Para New England, 2017 transcurrió sin mayor sobresalto. Tal vez la mayor sorpresa sucedió en la semana 1 cuando el equipo fue aplastado en el Gillette Stadium por Kansas City. Después de eso, solo volvería a caer ante Carolina y, como ya es clásico, de visita ante un rival de división, en este caso fue Miami. Su récord fue suficiente para ser el #1 de la AFC. Los playoffs no fueron mayor problema (bueno, Jacksonville los puso a sudar un poco) jugando en casa hasta viajar al octavo Super Bowl para la dupla Bellichick-Brady. Es ahí donde vendría la derrota más dolorosa al caer ante Philadelfia.
Habiendo jugado en tres de los últimos cuatro Super Bowls (y ganado dos), las expectativas vuelven a ser altas para este equipo. Por lo pronto, son dueños absolutos de la AFC Este. Aún no hay llegado un rival divisional que los rete.
Staff
Bill Belichick se mantiene como la cabeza de esta organización. No obstante, el año pasado hubo rumores sobre un distanciamiento entre el dueño de la franquicia, Robert Kraft, y él. Al final, Kraft desmintió esta situación. Así que, en el papel, prácticamente todo continúa en armonía en el staff de New England.
El principal cambio se da con la salida de Matt Patricia que ahora es HC en Detroit. Por lo pronto, no ha sido definido un coordinador defensivo como tal, pero eso no debe ser problema. Belichick podría hacerse cargo de este grupo si es necesario. A la ofensiva, Josh McDaniels estará de vuelta tras haber echado para abajo su contratación en Indianápolis.
Belichick tuvo a su disposición dos selecciones de primera ronda que usó para reforzar a la ofensiva. Estuvo muy activo con los cambios tanto en agencia libre (Brandin Cooks) como el mismo día del draft. En agencia libre volvió a destacar su estrategia de dejar ir a los veteranos de casa cuyos contratos subirán considerablemente y contratar veteranos baratos de otros equipos.
Ofensiva
Como ya es costumbre, New England no tuvo problemas para mover el balón y se ubicó como el equipo #2 produciendo puntos (28.6 por juego). Mostró muy buen balance al terminar como la ofensiva #2 por pase y la #10 por carrera.
Tom Brady (4,577 yardas, 32 yardas, 8 Tds) tuvo otra buena temporada en 2017 y logró su tercer año consecutivo con un rating mayor a los 100 puntos. En 2018, estará cumpliendo 41 años y entrará a su temporada #19. Definitivamente, ha sido un jugador longevo. Hasta ahora, el tema de la edad no ha sido un obstáculo, aunque siendo quisquillosos si comenzó a perder empuje en la recta final de la temporada pasada. Tras haber lanzado para 26 Tds y tres intercepciones en las primeras 12 semanas, terminó lanzando solo seis touchdowns y cinco intercepciones en las cinco últimas. Claro, en los playoffs, continuó acumulando estadísticas, pero creo que si comienza a haber un cierto declive. No obstante, sería muy precipitado de mi parte decir que no volveremos a ver a un Brady productivo.
El grupo de corredores volverá a estar muy nutrido, aunque ya no contará con Dion Lewis. Rex Burkhead, Sony Michel (novato), James White y Jeremy hill son los jugadores que estarán repartiéndose los acarreos. En 2017, Burkhead tuvo participación limitada debido a lesiones, pero produjo 518 yardas combinadas y ocho touchdowns. Es posible que, mientras se mantenga sano, él acapare más trabajo que el resto. Habrá que seguir la evolución de Michel como profesional. A nivel colegial, en la Universidad de Georgia, estuvo compartiendo la carga de trabajo con Nick Chubb. Su principal diferenciador fue su capacidad para alinearse como receptor también. Así que no sería raro ver a Michel en el campo, aún con la presencia de otro corredor. White continuará viendo trabajo en situaciones de pase y Jeremy Hill podría ser el favorito en situaciones de corto yardaje. De cualquier forma, New England podrá continuar produciendo en el juego terrestre.
Para esta temporada habrá una reconfiguración en el grupo de receptores tras la partida de Danny Amendola (Miami) y Brandin Cooks (LA Rams). Además, Julian Edelman estará suspendido por los primeros cuatro juegos. Esto deja a Malcolm Mitchell y Chris Hogan como los principales elementos en esta posición, aunque también contarán con el apoyo de Jordan Matthews, Kenny Britt y Phillip Dorssett. El problema de Hogan y Mitchell es que ambos han batallado con lesiones los dos últimos años así que si existe cierta percepción de debilidad en este grupo. Sin embargo, nunca hay que pasar por alto la presencia de Rob Gronkowski (1,084 yardas, 8 Tds) quien, inevitablemente, se abre paso ante las defensivas.
La línea ofensiva vio partir a Nate Solder (NY Giants), pero Bill Belichick reaccionó rápidamente y, con su primera selección en el draft, tomó a Isaiah Wynn. Más tarde también realizó un cambio con San Francisco para adquirir a Trent Brown (SF) en caso de que Wynn tarde en adaptarse. El resto de la línea continúa con la misma estructura del año pasado.
Defensiva
La defensiva ha tenido éxito estadístico en los últimos dos años. En 2016, terminó siendo la #1 en puntos permitidos y en 2017, fue la #5. Sin embargo, no termina de convencerme en que realmente pertenezca a la élite de la liga. Tan solo en un repaso a los dos últimos Super Bowls, se puede constatar que ha permitido 69 puntos en esos juegos. Por supuesto, uno logró sacarlo adelante, pero en el otro se quedó corto. Creo que si hay un área en la que tal vez Bellichick ha pecado de soberbio es en el manejo de su defensiva. A veces apuesta demasiado a maximizar el desempeño de un grupo de jugadores promedio.
La línea defensiva contará con dos nuevos elementos tras la llegada de Danny Shelton (Cleveland) y Adrian Clayborn (Atlanta). Ambos embonan perfectamente en el tipo de jugadores que suelen maximizar sus resultados con Bill Belichick: veteranos de mediano perfil que han tenido algunos chispazos en sus carreras. Ayudarán a solidificar a una defensiva terrestre que terminó #20 en yardas permitidas. Estarán acompañados por los ya muy conocidos Trey Flowers (62 tacleadas, 6.5 capturas, 2 fumbles) y Malcom Brown (49 tacleadas, 2.5 capturas). En la rotación también estarán Derek Rivers, Vince Valentine y Lawrence Guy.
La figura en el grupo de linebackers es D’onta Hightower quien estará de vuelta tras haberse perdido la mayor parte de la temporada 2017. Prácticamente, él es los ojos de Belichick en el campo. Así que su presencia es fundamental. Lo acompaña Kyle Van Noy (73 tacleadas, 5.5 capturas), Marquis Flowers (32 tacleadas, 2.5 capturas) y Elandon Roberts (67 tacleadas, 2 capturas). Hay que tener en cuenta que Belichick puede tener de dos a cuatro LBs en sus formaciones.
La secundaria vio partir a Malcolm Butler pero no tuvo otra baja relevante. La adición que más llama la atención es la de Jason McCourty (CB) quien se reúne con su gemelo Devin (S). Tendrán que hacer un mejor esfuerzo al haber en esta temporada, pues en la pasada, tuvieron la tercera cifra más alta en yardas permitidas (251).
Equipos especiales: Stephen Gostowski volvió a superar el 90% de efectividad en 2017, después de un 2016, relativamente flojo (84.4%). Se mantiene como una de las principales armas para producir puntos en este equipo. Es importante mencionar que la temporada pasada logró su FG más largo (62 yardas), así que la potencia en su pierna continúa. Cordarrelle Patterson será el responsable de los regresos. Es uno de los jugadores más peligrosos en este rubro.
Pronóstico: Hablar de New England es hablar de un sistema, de una metodología de trabajo que, hasta ahora, no ha podido ser invalidada contundentemente. Por supuesto, hay juegos en los que termina no funcionando o es rebasada, pero tiene demasiada evidencia histórica a su favor para ir en contra de ella.
El calendario de New England es el #22 en dificultad para esta temporada. Eso simplifica aún más su camino. Adicionalmente, hay que tomar en cuenta su casi permanente dominio divisional.
Como ha hecho costumbre este equipo, la expectativa es de doble dígito en la columna de victorias. Solo una verdadera debacle en el liderazgo interno pudiera negarselo. Récord 2018: 12 – 4.