Récord 2018: 4 – 12
Draft (por orden de selección): DE Clellin Ferrell (pick 4), RB Josh Jacobs (pick 24), S Jonathan Abram (pick 27), CB Trayvon Mullen (pick 40), EDGE Maxx Crosby (pick 106), CB Isaiah Johnson (pick 129), TE Foster Mareau (pick 137), WR Hunter Renfrow (pick 149), EDGE Quinton Bell (pick 230)
Agencia libre
Jugadores adquiridos (equipo de origen): WR Antonio Brown (Pittsgburgh), RT Trenton Brown (Nueva Inglaterra), WR Tyrell Williams (LA Chargers), FS LaMarcus Joyner (LA Rams), CB Nevin Lawson (Detroit), OLB Vontaze Burfict (Cincinnati), QB Mike Glennon (Arizona), DE Benson Mayowa (Arizona), DT Josh Mauro (NY Giants), ILB Brandon Marshall (Denver), WR Ryan Grant (Indianápolis), RB Isaiah Crowell (NY Jets), WR J.J. Nelson (Arizona), TE Luke Willson (Seattle), G Jordan Devey (Kansas City), QB Landry Jones (Jacksonville), TE Erick Swoope (Indianápolis)
Jugadores perdidos (equipo destino): TE Jared Cook (Nuevo Orleans), TE Lee Smith (Buffalo), G Jon Feliciano (Buffalo), A.J. McCarron (Houston), OLB Shillique Calhoun (Nueva Inglaterra)
En 2018, después del revuelo causado por la contratación de Jon Gruden como Head Coach, parecía haber cierto optimismo sobre el desempeño de la franquicia. Sin embargo, el equipo no pudo levantar en ningún momento de la temporada. Después del primer mes, el récord apenas era de 1 – 3. Las cosas no mejoraron una vez transcurridos octubre y noviembre. Obviamente, para diciembre, el equipo ya no tenía nada por lo cual pelear, más bien buscaba posicionarse lo mejor posible hacia el draft. En general, a este equipo se le vio muy poca idea tanto a la ofensiva como a la defensiva.
Hay mucho trabajo pendiente para todo el staff en 2019. Siempre hay margen de error en la primera temporada, pero la paciencia se termina rápido entre los aficionados de la NFL. Además, la posición de esta franquicia es aún más endeble al estar por mudarse de sede.
Staff
Jon Gruden tuvo una flojísima temporada debut después de varios años alejado del terreno de juego. El equipo lució perdido y con falta de liderazgo durante la mayor parte de la temporada. Una de las principales situaciones a seguir para 2019 será ver el entendimiento que este coach logre con su QB, pues por momentos la relación lució tensa.
Greg Olson y Paul Guenther se mantienen a cargo de la ofensiva y defensiva, respectivamente. Fue poco el avance que mostraron en su primer año, pero la muestra aún es muy pequeña para emitir un juicio sobre su trabajo. Este año aún cuentan con el beneficio de la duda.
Mike Mayock es el nuevo gerente general. Después de pasar varios años como uno de los analistas de draft más reconocidos en los medios, Jon Gruden y Mark Davis (dueño) decidieron hacerlo parte del staff. Después del campeonato colegial entre las Universidades de Alabama y Clemson, este analista declaró que si fuera posible tomaría a la mayoría de los jugadores de estos equipos para armar a su equipo. No mintió pues agregó a cuatro de sus elementos en el draft (tres en los primeros 40 picks). En general, se percibió poco ortodoxo el método de selección de Mayock, habrá que esperar un par de temporadas para ver resultados. En la agencia libre estuvo muy ocupado agregando todo tipo de jugadores. Obviamente, el movimiento más mediático fue el canje por Antonio Brown. En el papel, Oakland tendrá mucha tela de donde cortar en cuanto a talento se refiere en 2019.
Ofensiva
Oakland tuvo un pésimo desempeño ofensivo en 2018, terminando entre los peores 10 en casi todas las estadísticas. De aquellas mostradas en la tabla, solo las yardas por pase y las intercepciones estuvieron en un nivel sobresaliente. No es sorpresa que Mike Mayock haya buscado reestructurar casi en su totalidad este grupo, sobre todo en lo que se refiere a las “skills positions” (RB, WR, TE’).
Los cambios más relevantes se hicieron en el grupo de receptores que será totalmente nuevo. La adquisición de Antonio Brown vía “trade” fue uno de los movimientos más sonados al inicio del año. Este receptor dota inmediatamente al equipo con un arma que puede hacer jugadas a todo el ancho y largo del campo. Su presencia no solo contribuye en el juego aéreo, sino que, al demandar tanta atención por parte de las secundarias, abre oportunidades para el juego terrestre. Tyrell Williams es un buen complemento por su corpulencia y su efectividad en trayectorias de media y larga distancia. Ryan Grant y J.J. Nelson son los otros jugadores relevantes con los que contará Derek Carr. Otro jugador a seguir es el novato Hunter Renfrow, quien podría establecerse como un receptor slot tipo Wes Welker rápidamente. En si, el grupo de WRs luce bastante completo. Por ahora, las dudas giran en torno a la manera en la que Carr pueda aprovecharlos, pues en los últimos dos años su producción ha sido bastante discreta, sobre todo en lo que se refiere a pases de TD. Creo que es válido darle el beneficio de la duda al aún joven QB, pues tampoco ha contado con grupos de WRs robustos y, además, estará más familiarizado con el estilo de trabajo de Gruden y del coordinador Olson.
El novato Josh Jacobs está proyectado para adueñarse inmediatamente de la mayor parte de la carga de trabajo de la ofensiva terrestre. No obstante, Oakland aún cuenta con Jalen Richard, DeAndre Washington y Doug Martin para repartir acarreos. Más allá de la capacidad de estos jugadores, creo que la ofensiva terrestre de Oakland revivirá conforme al desempeño de su línea ofensiva. Este grupo tuvo su principal adición con la contratación de Trent Brown, quien ganó relevancia tras el éxito en Nueva Inglaterra. Sin embargo, es visto como un jugador promedio más bien. La madurez de Kolton Miller (1ª ronda en 2018) será factor también en la protección de pase.
Defensiva
Si el desempeño ofensivo de Oakland fue desastroso en 2018, el defensivo lo fue más. En otros equipos con mal desempeño defensivo, suele haber al menos una individualidad destacada. En Oakland ni eso hubo. El movimiento que mandó a Khalil Mack a Chicago dejó aún más desprotegida a esta unidad. Claramente, las 13 capturas del equipo en toda la temporada fue un producto directo de esta situación y también una estadística muy vergonzosa. Este año, tan solo por el hecho de haber tocado un fondo tan profundo, es muy probable que haya algún tipo de mejoría.
Para empezar, Mayock buscó traer suficiente talento vía draft. La selección de Clellin Ferrell sorprendió pues ningún especialista lo veía en el Top 5 en el draft (Tal vez entraba en el Top 20). Pero siendo menos meticulosos, es quien sustituirá a Mack como la fuerza en la presión sobre el QB. Por otro lado, el novato Johnatahn Abram estará sumándose a una secundaria que busca lograr un desempeño, ya no digamos sobresaliente, sino suficiente por primera vez en la última década.
Por ahora, esta defensiva aún luce en pleno proceso de reconstrucción. Las adiciones de Vontaza Burfict y Brandon Marshall dotan a este grupo de un par de veteranos que servirán para darle cierta estabilidad al grupo en el terreno de juego. Sin embargo, no hay como tal un veterano que se pueda considerar como el líder indiscutible de la defensiva. Habrá que esperar a ver si surge en el trancurso de la temporada.
Equipos especiales: Daniel Carlson se mantendrá como el pateador en intentos de goles de campo tras haber trabajado en 10 juegos con el equipo en 2018. Su efectividad fue de 94.1% (16 / 17) en ese lapso. Ésta será su primera oportunidad para iniciar toda la temporada. Las devoluciones correrán a cargo de Dwayne Harris, uno de los mejores jugadores de equipos especiales en la liga.
Pronóstico: Ofensivamente, el equipo posee el talento para poder competir nuevamente. Carr debe resurgir esta temporada como un QB productivo y la ofensiva terrestre gozará de mayor estabilidad. En cuanto a la defensiva, me parece que aún es pronto para echar las campanas al vuelo, sobre todo por la limitada experiencia de muchos de sus integrantes.
El calendario de Oakland es el más difícil en 2019. En las primeras 10 semanas de la temporada, solo los juegos contra Denver y Detroit lucen medianamente manejables. El resto lucen bastante complicados. La segunda mitad de la temporada no parece ser un escenario tan distinto al incluir ambos juegos contra LA Chargers.
Récord 2019: 5 – 11.